
Hay cosas que nunca cambian y otras que cambian demasiado. Pero siempre será una verdad universalmente aceptada que las relaciones pasan por momentos difíciles.
George aborrecía que Ari lo tratara así. En momentos como aquel odiaba, más que nunca, ser incapaz de abrazarla y que ella tampoco lo hiciera. Habían pasado tantas veces por lo mismo. Seguir leyendo «No soy yo. Eres tú»